En la tierra iya kokun habia un rio que se llamaba eyibi eyo que es
donde nacio o vivia en el centro del rio envuelto en hojas de bejuco
en el fondo la madre eyo.
Esta vivia su gran secreto que estaba en el ota donde ella se
enroscaba para hacer su vida. Siempre que ella quedaba oboñu, nunca
lograba su hijo porque le faltaba su sangre echarla, ella la iya
sufria porque a veces tenia mucha inflamacion en su vientre y no
podia respirar y tenia que abrir la boca para hacerlo.
Pero un dia ella vio una sombra grande que pasaba por alli y se
asusto y salio detras de esta que era eja-orun “la anguila “ que
saltaba y brincaba y ella con la desesperacion salto del rio y
en eso venia abita y cuando la vio empezo a cantar:
“ iya gbogbo wede eyo iya gbogbo wede euo tonwa
Iya gbogbo wede eyo iya gbogbo wede euo tonwa
Iya gbogbo wede eyo iya gbogbo wede eyo. “
Ella que oyo el canto se asusto y se engancho y se agacho y abita le
dijo: si tu quieres lograr lo que tu quieres tienes que hacer un
pacto conmigo y un juramento, ella le dijo que si y le conto lo que
le pasaba y abita le dijo que cada vez que tu paras y vayas a tener
un hijo este sera mi esclavo y mi gran compañero, ella dijo que
estaba conforme.
Abita le dijo tres yerbas: verdolaga, apasote y yerba fina y le dijo
cometela y ella se la comio, pero abita le dijo bejuco enredado para
que te cures y fue para su secreto e hizo lo que abita le dijo, cuando
tu llegues me llamas y me
Tienes que llamar asi:
“ abita kokonu korun inkun yewe ni bukuku oko ni ile
Esheni moyokun abita. “
Ella lo llamo y abita que habia unyen arrojo sangre la echo alli
y ella la comio y cayo oboñu y las hijos se envolvieron en
aquella sangre y los bejucos y se alimentaban. Ella se quedo
dormida y no sabias que habia parido y los hijos envueltos en el
bejuco y abita la llamo y este se le presento en forma de ologbo (gato)
dun dun que se lo quiso comer, pero se paro y le abrio los ojos y le
Enseño los dientes y le dijo: tu no podras vivir mas en tu secreto,
todas las cosas las haras en el suelo a la orilla y abita se retiro.
Eyo rodaba por el camino y no pudo llegar a su secreto y tarde de
noche hizo una cueva y sus omo que se fermentaron con la eye que ella
habia botado ya grandes salieron del rio, ella los vio salir de alli y
los maldijo, en eso que ella los estaba maldiciendo se aparecio
abita y le dijo:
Estos seran mis esclavos.