Un día Bara Petu que era el nombre de Orunmila en la tierra Iyesa se miró y le salió este Ifá, donde tenía que rogarse la cabeza; pero como tenía que salir, no se la rogo. cerca de su casa había una finca en la cual había un sembrado de cocos, al pasar por allí Orunmila tuvo que entrar debido a que tenía que hacer una necesidad. resulta ser que en esa finca unos ladrones robaban todos los días los cocos y Orunmila que iba con un saco lo puso debajo de una mata y este quedo con la boca abierta y de la mata cayeron dos cocos dentro del saco, sin que Orunmila se diera cuenta. al terminar, Orunmila tomo su saco, se lo puso al hombro y salió de la finca brincando la cerca, y resulta ser que los hombres que estaban cuidando le dan el alto y lo registran y le encuentran los dos cocos dentro de su saco. entonces ellos dijeron, este mismo es el ladrón y lo llevaron delante de los dueños de la finca. cuando esto sucedía pasaba un muchacho, que no era otro que Elegba y vio lo que le pasaba a Orunmila, y como lo conocía se le acercó y le pregunto qué era lo que le pasaba y Orunmila le conto todo. luego sin decir palabra se marchó y llego a su casa y se realizó un ebbo de traición y terminado este se dirigió a la casa del dueño de la finca y le dijo: señor ese hombre es Orunmila, hombre honrado y bueno conocido por todo el mundo como excelente persona, logrando así que el dueño de la finca lo soltara.
Comentarios