Había dos pueblos que peleaban, y en las encarnizadas luchas
Cayeron prisioneros los reyes de ambos pueblos. En esos
Tiempos, se acostumbraba al canje de los prisioneros; pero
sucede que una de las partes en guerra le da muerte al rey
Contrario. Cuando llega la hora de realizarse el cambio no
sabían de qué manera cumplir lo pactado; pero da la casualidad
Que en ese pueblo había un hombre idénticamente igual
Que el rey muerto y no era otro que Eyiogbe y dan la orden
De captura en su contra. Este se dio a la fuga y se refugio
En lo más intrincado del monte porque pensó que lo estaban
Buscando para matarlo o encarcelarlo. Tanto lo buscaron que
Lo encontraron, lo hicieron prisionero y lo condujeron hacia
La capital de aquel reino.

Por el camino el prisionero les suplicaba a sus captores que
Lo soltaran que él no había hecho nada contra nadie ni había
Violado ninguna de las leyes de su pueblo. Los captores lo
Trataron con todo tipo de cortesía y atenciones y le aseguraron
Que no lo iban a matar ni mandar para la cárcel, que
Lo conducían hacia el palacio del rey para hacerle un gran
Favor por el cual se haría rico.
Cuando llegaron al palacio, vistieron al prisionero con las
Ropas y atributos del rey enemigo asesinado por ellos,
Resultando idéntico al mismo y así lo cambiaron por su
Propio rey.

Y Eyiogbe se quedó de rey de aquella tierra.
Esta es la coronación de Eyiogbe, el cual no pudo ser rey en
Su propia tierra.
Este es el motivo por lo que se dice al rey muerto, rey
Puesto.