Habia un capataz muy querido por todos sus trabajadores, pero tenia un
enemigo que le llevaba la contraria, diciendo que el estaba muy viejo
para dirigir y que habia que sustituirlo cosa esta que hizo el jefe.
El nuevo capataz al tomar el mando ordeno un paro para celebrar su
triunfo, estando de fiesta y sin trabajar tres dias.
El capataz desplazado, que era hijo de yemaya, fue a mirararse con
orunmila, le salio este ifa y le marcaron ebbo con: akuko meyi, un
lingote de hierro. El hizo el ebbo y los akuko se los dieron a yemaya y
al ebbo. Despues orunmila le dijo: llevalo al embarcadero y amarra
el lingote a la quilla de uno de los barcos sueltos en el
Mismo. Asi lo hizo el capataz despedido pues como todos estaban de
fiesta no se percataron de lo que el hacia en una de aquellas
embarcaciones.
Cuando se termino la fiesta, que cada cual fue a ocupar su puesto de
trabajo, los que trabajaban en aquella barcaza no pudieron moverla a
pesar de todos los esfuerzos que hicieron por lo que mandaron a buscar
al nuevo capataz, pero este tampoco pudo ponerla a navegar, por lo que
parte del trabajo en aquel embarcadero quedo paralalizado.
Ante esta situacion el dueño del embarcadero mando a buscar al
capataz viejo, pues entonces penso que tenia mas experiencia que el
nuevo, para que le resolviera el problema. Cuando el capataz viejo
llego a ocupar de nuevo su trabajo, yemaya, con su virtud solto el
lingote de aquella embarcacion por lo que la misma comenzo a navegar y
se estabilizo el trabajo en el embarcadero.
El capataz nuevo al ver su fracaso y que habia sido despedido, se
emborracho y fue a ver a su hermana, que era hija de oshun y que le daba
buenos consejos que el nunca oia. En ese momento cuando ella trato de
aconsejarlo el le dio un fuerte golpe y la mato. Despues escondio el
cadaver en la bodega de un barco y cuando lo encontraron por las
huellas que el habia dejado por causa de su borrachera, se supo quien
habia sido; por lo que la justicia lo prendio y lo juzgo por asesinar a
su hermana.