Cierta vez agboyami el pavo real era blanco y estaba en casa de olofin, donde gozaba de toda confianza
de este y el le falto un dia y por temor a que este le maldijera se fue huyendo para la casa de olokun que lo
conocia por haberlo visto en casa de olofin.
Cuando olokun lo vio le pregunto porque se habia marchado de la casa de olofin y abeyami le dijo que el
nunca habia estado alli, entonces olokun le dio albergue y cuando este entro lo pinto de muchos colores
que mayelewo su hija le dio, entonces el pavo real durmio con la hija de olokun y le falto el respeto a la
hospitalidad que este le habia brindado y tuvo que salir huyendo tambien de ese lugar. En su andar por el mundo llego a casa de oggun y este le pregunto lo mismo y el pavo real nego haber
visto a olofin alguna vez, asi como a olokun, oggun le dio hospitalidad y este le falto el respeto
enamorando a su mujer y tuvo que salir huyendo, por el camino se encontro con iku y este le dijo: vamos
hacer un trato para estar juntos, y comenzo a contarle todos los secretos de la vida y la muerte, ellos
estuvieron juntos un poco de tiempo, pero como el pavo real tenia la costumbre de ser conversador fue y
descubrio todos los secretos de la muerte, mas iku lo supo y salio a buscarlo.
Cuando iku lo encontro este lo vio y se mando a correr y se escondio en casa de oshun, donde ella al
verlo tan bello lo acogio deslumbrada y se cubrio con sus plumas que le daba ashe, al llegar iku se le tiro
pero al ver salir a oshun de entre las plumas del pavo real se detuvo y como el estaba enamorado de
oshun acepto la suplica que esta le hizo de perdonar al pavo real al decirle que este era su vestido
preferido, iku lo perdono y dijo: todo aquello que se vistan con el ashe de agboyami y oshun implore por
ellos obtendran el perdon de iku siempre que olofin no determine otra cosa.