En la tierra ololukoye que era tierra de grandes y profundos secretos donde todos sus hijos al nacer se le hacian grandes consagraciones para evitar las perdidas de estos y de sus mayores. Cierto dia llego a esta tierra shango quien venia acompañado por oya. Shango tenia la mision por mandato de olofin de poner a gobernar en esa tierra a oya y cuando entraron en inle ololukoye empezo a cantar: "baba olofin omo shango iya beleke oya iyanza omo dide inle ololukoye". Todo el pueblo al oir a shango salio a rendirle moforibale y cuando todos estuvo reunido shango se dirigio a ellos; por mandato de olofin les traigo a esta mujer la cual se llama oya para que los dirija, ella impartira los mandatos de olofin entre ustedes. En aquella tierra habia un awo que era omo shango y era quien regia todas las ceremonias que alli se hacian y era a su vez el oba de aquella tierra y shango al verlo se dirigio a el y le dijo: olofin sabe que en esta tierra cuando hacen ceremonia y que esta tierra esta llena de secretos pero hace falta alguien que no sea de aqui para que confirme las consagraciones y shango se retiro confiado con la promesa de regresar para ver como marchaban las cosas, no sin antes decirle al awo hijo suyo y a oya que si lo necesitaban lo llamaran. Paso el tiempo y oya y el hijo de shango consagraban a todos los hijos de aquellas tierras, pero el hijo de shango no estaba muy conforme con que oya estuviera a su lado pero no decia nada por temor a shango y a olofin.Cierto dia se presento ante el un joven al que habia que hacerle ifa y el awo se puso muy contento y mando a buscar a oya para que esta le avisara a shango de la nueva consagracion que iban a realizar y shango al ser informado por oya se presento y le dijo al awo: por primera vez sera consagrado en ifa un hijo de esta tierra y hay que estar muy atento al oddun que olofin le dara. Shango y su hijo hicieron los preparativos y le hicieron ifa al muchacho y el oddun que trajo fue el de osa kana donde olofin decia que los mayores del nuevo awo tenian que jurarse en un secreto que alli no se conocia y lo tenian que hacer junto al nuevo awo para que asi no hubiera perdidas y shango le dijo a su hijo que habia que hacer un pacto con iku para que ninguno de los dos se perdiera. Shango mando a buscar a su omo nueve palomas negras, dos pedazos de yagua y buscar ewe tete elegun y ewe yiniya y que tuviera todo preparado para cuando el volviera y cuando shango vino fue acompañado por oya la cual vino en forma de viento; shango traia en su mano un eya oro y cantaba: "iku lele iku lele igba orun awo osa kana ofo ira oba orun". Y al momento el viento se hizo mas fuerte y el hijo de shango al ver venir a oya junto con su padre le dijo a su ahijado: aguanta aqui todas estas cosas que mi padre me mando a buscar; yo delante de oya no me voy a dejar hacer nada y se marcho. Cuando shango y oya llegaron al lugar acompañado de un fuerte viento, shango le dijo al awo osa kana: deja a mi hijo; esta perdido y shango en presencia de oya juro al awo osa kana en iku y cuando termino iku le dijo a shango y a oya; tu hijo por no oirte y no respetarte a ti ni a oya esta sentenciado por olofin cuando vino osa kana a estas tierras. Yo nada puedo hacer por el; ya que no considero a oya ni mucho menos consagrarse conmigo por eso el mismo se perdio.