Una vez orunmila quiso ir a la plaza y obatala busco a
eshu para que lo acompañara. Este le pidio que le
diera de comer y despues le acompañara a la plaza.
Al otro dia muy temprano llego la gente a la plaza y
vieron salir a un hombre por un callejon y que se alejaba
rapidamente, ellos lo siguieron y al entrar en el callejon
o trillo vieron un tinajon lleno de dinero y grandes
pilas de ñame. Eshu que estaba entre aquellas gentes, por
medio de la virtud trajo cargadores y ordeno que todo lo
llevaran para la casa de orunmila.