Habia un rey que tenia una hija soltera y este se fue a mirar con orunmila y orunmila le dijo que para que su hija fuera feliz el tenia que casarla con un awo. El rey le contesto a orunmila que no, que como una princesa se iba a casar con un awo. Orunmila le dijo: pero cuando usted muera, ella no gobernara, sino una mujercita suya