Shango le acepto la guerra a un enemigo muy fuerte y poderoso que
vivia en el llano.
Shango subio a la loma y desde lo alto observo todos los movimientos
del enemigo y le tiro una ota amarrada a una onda, le dio en la cabeza
derribandolo y mato al poderoso, y no conforme con esto, bajo de la
loma y con su espada le corto la cabeza.