Habia una tierra que tenia un rey y este rey tenia un general de ejercito en el palacio, quien era recto y muy experto en las guerras y manejaba muy bien el sable.

Este general viendo que las perspectivas en ese reinado eran muy malas, decidio irse y se dedico a vivir solitario y aislado de todos, lejos de alli.


Al rey se le presento una guerra y no teniendo a nadie capacitado para ganar la guerra, se acordo del general y lo mando a buscar.

El general se presento, pero le pregunto al rey que cual era la autoridad que el le garantizaba, y el rey le dijo que tenia todas las facultades de mando, armas y un ejercito.

Entonces partio para la guerra y en esta salio victorioso, pero mando a un mensajero por delante para dar la noticia.

El rey mando a construir como una especie de casa de campaña a un costado del palacio y coloco 4 soldados para cuidar la entrada ya que tenia la idea de entrevistarse a solas con el victorioso general.

Al dia siguiente el general se presento con su tropa, tocando las cornetas desde muy lejos, y cuando entro al palacio el rey lo recibio y lo llevo para la casa de campaña para que le contara sobre sus triunfos.

El general era muy expresivo y al hablar hacia muchos ademanes y gestos. Mientras le hacia la historia al rey, saco el sable como lo hacia en el combate y en una de esas veces, le corto la cabeza al rey.

Cuando se supo lo ocurrido, lo ajusticiaron a el tambien.