En este camino habia un individuo al cual olofin lo habia hecho cargo de la vegetacion, su propiedades y sus virtudes. La gente del pueblo cuando necesitaba una hierba para curarse o para hacer rogaciones de santo, se las pedian a ofun di. Ofun di empezo a creerse imprescindible y se mostraba ocioso hasta llegar a no querer trabajar. La gente al ver su abandono y falta de atencion a sus necesidades, se vieron obligados a darle las quejas a olofin. Este al verse avergonzado de la mala eleccion hecha por el, se puso a llorar al pie de una ceiba (araba). Ozain, que en aquellos tiempos no tenia mas poder que el de la mala suerte, se habia hecho ebbo y le salio que tenia que llevarlo al pie de una ceiba. Ozain lo llevo y al llegar se encontro a olofin llorando y le pregunto, contandole olofin lo sucedido. Ozain le dijo que si el queria el se haria cargo de los poderes de ofun di y olofin se lo concedio.